Skip to main content

La actualización de la instalación eléctrica, clave contra la obsolescencia de las viviendas

21 febrero, 2023

Estamos ante una gran transformación socioeconómica, tal vez la más importante desde la revolución industrial. Por un lado, la digitalización, una nueva era que impacta en todas las formas de interrelacionarnos con nuestro entorno; y, por otro lado, la descarbonización de la economía y de la sociedad, suponiendo el fin de las energías fósiles para frenar el cambio climático. La electrificación es el elemento común, facilitador e imprescindible, de ambas transformaciones.

Esta transformación alcanzará, mejor dicho, ya alcanza, a cada rincón de nuestra sociedad y supone un cambio de hábitos y de modo de vida. Nuestro hogar, como centro y refugio de nuestra cotidianeidad, también debe transformarse y estar preparado para acceder en condiciones a la revolución eléctrica y digital que acontece.

España es el segundo país europeo con más edificios construidos y dispone de un parque de más de 29 millones de viviendas. No obstante, unos 13 millones no tienen una instalación eléctrica preparada y en condiciones. Hasta ahora, al abordar una reforma, ha sido frecuente obviar lo que no se ve, como la instalación eléctrica. Hacer lo mismo, hoy, es condenar a los hogares a su rápida obsolescencia, a un envejecimiento prematuro.

El futuro implica la incorporación de nuevas tecnologías eléctricas, como la aerotermia, el autoconsumo energético, la iluminación inteligente, la movilidad eléctrica o los electrodomésticos conectados; todas ellas esenciales para afrontar esta transformación con garantías. Una instalación eléctrica actualizada es, en este sentido, esencial. No obstante, 8 de cada 10 españoles desconoce la importancia de incluir en las obras de rehabilitación la actualización eléctrica para tener una vivienda preparada para el futuro.

 La tasa de rehabilitación del parque residencial en España es del 0,08%. Nada que ver con nuestros vecinos europeos: Francia (2,01%), Alemania (1,49%) o Italia (0,77%). Porcentajes que nos tendrían que alarmar si tenemos en cuenta que, en nuestro país, el 42,9% de las viviendas fueron construidas entre 1980 y 2006, siendo totalmente ineficientes desde el punto de vista energético.

 Una oportunidad única

El momento, además, es ahora. Nunca antes había existido un número de ayudas tan elevado a distintos niveles: local, autonómico y estatal. El nuevo instrumento de recuperación Next Generation EU ha permitido movilizar un volumen de inversión sin precedentes y, en este contexto, el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España ha trazado la hoja de ruta para la modernización de nuestro parque inmobiliario.

Tal y como dice la presidenta del Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España (CSCAE), Marta Vall-llossera, “la ola de rehabilitación de viviendas y regeneración urbana constituye una ocasión única para impulsar la transformación, profunda y generalizada, que requiere nuestro parque edificado para alcanzar la neutralidad climática”. Las ayudas pueden llegar a cubrir hasta un 80% de los costes de ejecución material de la obra; además, el Gobierno puede facilitar, parcialmente, la subvención de un informe técnico previo que permita al propietario visualizar cuál es el potencial de mejora que tiene su edificio. Ahora bien, como venimos alertando, de nada sirven estas ayudas públicas si la instalación eléctrica se deja al margen…

No olvidemos que los edificios que hagan un uso menos eficiente de la energía o que no cumplan con las mínimas condiciones de habitabilidad acabarán asumiendo sobrecostes en consumo, así como otras penalizaciones. Por el contrario, una vivienda rehabilitada y eléctricamente actualizada incrementará su valor en un 25% y logrará un ahorro de hasta un 80% en el gasto energético de calefacción y refrigeración. Razones no nos faltan.

El origen eléctrico

A la vista de estos datos reclamamos que, al rehabilitar, lo hagamos bien. Es imprescindible un diagnóstico experto de la instalación eléctrica de la vivienda y, en función de su resultado, que se proceda a su actualización dentro del proceso de rehabilitación.

La instalación eléctrica es la columna vertebral de cualquier hogar. No se ve, pero de ella depende la calidad de la eficiencia energética, la sostenibilidad y la seguridad. Rehabilitar sin actualizar la instalación eléctrica es quedarse a medias, condenando al inmueble a un envejecimiento prematuro, además de asumir un importe mayor en la factura de la energía, limitando notablemente su revalorización y su uso.

Una vivienda que cuenta con un buen diagnóstico de la instalación eléctrica es una vivienda eficiente energéticamente, sostenible y preparada para el futuro. Además, en cualquier proceso de rehabilitación eléctrica, se realiza siempre un buen tratamiento de los residuos generados, los cuales son recogidos y trasportados para su correcto reciclaje según el RD de aparatos eléctricos y electrónicos.

A raíz de este escenario, hemos llevado a cabo una acción de sensibilización en https://rehabilitacionelectrica.com/. El objetivo no es otro que concienciar a los profesionales de la rehabilitación y a la ciudadanía de la trascendencia de una instalación eléctrica actualizada.

¿Nos acompañas?

Coautores: Eduard Sarto, presidente de ADIME; Francesc Acín, presidente de AFME; Benito Rodríguez, presidente de AMBILAMP y AMBIAFME; Francisco Pardeiro, presidente de ANFALUM; Ángel Bonet, presidente de APIEM; Francisco Alonso, presidente de CONAIF y Jordi Calvo, presidente de FACEL.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies